Tanto si tienes un blog como si estás escribiendo tu primera novela, debes de tener unos hábitos de trabajo, del mismo modo que en tu día a día tienes una rutina, si quieres tomarte en serio esto de escribir debes hacer lo mismo.

A continuación, te enumero una serie de consejos para que escribir sea una parte más de tu día:

-Para comenzar, escribir tiene que ser como el comer o el lavarte los dientes después, lo tienes que marcar como algo que tienes que hacer cada día, sin excepción.

-Busca el lugar de tranquilidad donde puedas escribir y dar rienda suelta a tu imaginación, el comedor de tu casa, una terraza, en un parque, en la biblioteca, eso ya lo dejo en tus manos, pero tienes que sentirte a gusto en ese sitio y poder conseguir el punto de concentración suficiente.

-Hay gente a la que le gusta escribir nada más levantarse, o mientras desayunan y toman una taza de café, a mí, personalmente me gusta más escribir a última hora de la tarde, cuando ya lo tengo todo hecho y puedo sentarme con calma. Debes lograr averiguar cuál es tu hora de máxima inspiración y entonces darlo todo.

-No importa si al sentarte no sabes que escribir, simplemente hazlo, aunque sea una línea, por poco que escribas, siempre será más que dejar una página en blanco.

-Este punto va relacionado con el anterior, el temido síndrome de la página en blanco. Llega el punto en el que todo escritor cree haberse vaciado, y que ya no tiene más ideas, olvídate, escribe lo que sea, pero escribe. Mira a tu alrededor, el paisaje que tienes ante ti o las personas que ves, te pueden servir para dar rasgos a uno de tus personajes, o a alguna de las escenas de tu libro.

-A lo largo del día puedes ir viviendo situaciones o momentos que puedes adaptar de una manera u otra a tu libro, todos los libros escritos tienen parte de algún momento de la vida de su autor.

-Si usas una plataforma tipo Word o Scrivener, márcate un mínimo de palabras diarias. En el caso de estar escribiendo una novela, cualquiera de estos dos programas tiene contador de palabras, establece un mínimo de quinientas o mil al día, no siempre lo podrás cumplir, pero no te preocupes, solo es una manera de motivarte, ver como el contador llega a la meta establecida.

-En el caso de que escribas un blog, tienes que intentar escribir una entrada a la semana como mínimo, y ser constante en el tiempo, no sería ni el primero ni el último que después de dos o tres meses su blog no ofrece nada nuevo, y con ello cae en el olvido.

-La calidad de lo que escribes también es un punto importante, para que no caiga en el olvido, escribe de lo que sepas, si escribes una novela, como es mi caso, escribe todo lo que te vaya sucediendo, todo lo que vas leyendo sobre los pasos a seguir, ayuda a otros del mismo modo que te han ayudado a ti.

Estas son algunas de las cosas, que deberíamos hacer si queremos que esto de escribir, no quede en otro pasatiempo más, que hayamos dejado a medias bien por aburrimiento, bien por falta de ideas.

¿Alguno de tus hábitos se encuentra entre los nombrados? ¿No? Comenta los tuyos y compártelos así con el resto de personas. Hasta la próxima entrada.